Equilibrio, gestión emocional y desarrollo personal
Cómo aprender a canalizar y gestionar los sentimientos y las emociones en el día a día
La vida, a veces, nos trae situaciones dolorosas o difíciles como rupturas, cambios de trabajo, fracasos, enfermedades o tomar decisiones.
Otras veces nos sentimos abrumados, sufriendo, no vemos la salida o no entendemos lo que nos ocurre, nos encontramos atrapados en una espiral en la que no sabemos salir, sentimos ansiedad, miedo que a veces nos paraliza, falta de valor, y estas emociones se van somatizando en el cuerpo.
Esto nos puede llevar a padecer estrés, ansiedad, depresión, dolores de cabeza, dolores tensionales, bruxismo, insomnio o dormir mal, me levanto cansad@ sin energía y triste,… o puede llevar a derivar en otros problemas de salud.
Unido a que vivimos un ritmo de vida, a veces, ajetreado, sin darnos tiempo a vivir y a conectar en el presente, a conectar con nosotros mismos y, a veces, tampoco sabemos cómo hacerlo.
Con técnicas como el Mindfulness, atención plena, combinado con Programación Neurolingüística (PNL) e Inteligencia Emocional, aprendemos a tomar conciencia y a saber gestionar esas emociones.
Separarse y reconocer tus pensamientos, poner en duda los patrones mentales y ver los que nos limitan, permitiéndonos ver de forma positiva. Esto nos permite identificar de forma positiva las emociones y así saber gestionarlas, afrontando de esta manera las situaciones, la vida con más calma, serenidad y, también, para poder tomar decisiones más correctas, mejor capacidad de comunicarte y comunicar tus emociones a otra persona, responder de una manera apropiada al estrés y vivir con más tranquilidad.
Este programa te ayuda a:
- Entender tus emociones y saber cómo influyen en las decisiones que tomas.
- Desarrolla tu conocimiento y autoestima, la visión positiva de ti mismo.
- Desarrolla la inteligencia emocional. Mejora de autoconciencia y autoconocimiento, nos hace evolucionar internamente.
- Hablarte a ti mismo de forma positiva. Y, a través de la compasión, la amabilidad hacia nosotros mismos y los demás, se consigue que las cosas no nos afecten tanto.
- Mejora tus habilidades sociales y la forma de comunicarte con los demás.
- Ayuda a reducir el estrés y la ansiedad, identificar las emociones, las situaciones que nos generan tensión, ansiedad, miedo,… y a manejarlas con eficacia.
- Refuerza tu autoestima y amor propio.
- Vivir y desarrollar hábitos positivos.